Los problemas gastrointestinales son muy comunes en el deportista de resistencia (maratón, ultramaratón, marcha, etc.) y uno de los principales motivos de abandono o bajada de rendimiento.
Se estima que entre un 25 – 70 % de los atletas de resistencia presentan o han presentado problemas de este tipo. Los principales motivos de consulta que nos encontramos son: náuseas, vómitos, dispepsia, cólico abdominal, urgencia de defecación, diarrea o heces con sangre. Cualquiera de estos síntomas puede arruinar la carrera deportiva del atleta y deben ser tratados por un profesional sanitario. Bill Rogers, 4 veces ganador de las maratones de Nueva York y Boston llegó a afirmar que “muchas maratones se ganan o pierden en los lavabos y no en la mesa”.
La causa de estos problemas gastrointestinales suele ser multifactorial. La isquemia (disminución del flujo sanguíneo) intestinal provocada por el ejercicio físico provoca el aumento de la permeabilidad intestinal, es decir, permite que sustancias inflamatorias o patógenas pasen más fácilmente a la sangre. Otra de las causas principales podría ser el uso continuo de AINES (anti inflamatorios no esteroideos, como el famoso ibuprofeno), el trauma mecánico provocado por el mismo ejercicio o el aumento de la temperatura corporal durante la práctica deportiva. Todo ello, unido a otros factores, provoca una mayor predisposición a la inflamación intestinal y a una alteración de la microbiota intestinal.
En relación a la nutrición, se ha demostrado que los problemas gastrointestinales pueden tener lugar con o sin ingesta previa. Se ha visto que algunos nutrientes como la fibra, las grasas, la proteína y la fructosa, así como un estado de deshidratación, son desencadenantes de estos síntomas.
En el siguiente artículo hablaremos sobre las posibles soluciones a estos problemas.